Narrativas/Moisés Uribe
Tres65news
El dirigente nacional de Morena, Mario Delgado ya dio el banderazo de salida a los tres contendientes para el 2024: Claudia Sheimbaum, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López.
La primera es la actual Jefa de Gobierno de la Ciudad de México y a la postre la favorita del Presidente López Obrador; el segundo es el Secretario de Relaciones Exteriores y quizás el candidato nato y más fuerte de Morena pero no es bien visto por quien va a palomear al designado; y en tercer lugar está el Secretario de Gobernación y paisano del presidente, que entra a la tercia por si las cosas se salen de control para los planes presidenciales.
El Estado de México, donde el próximo año habrá elección para gobernador, fue el escenario donde Delgado soltó el método para elegir al candidato, señalando que habrá elecciones primarias, método que tiene en la mira dejar fuera a Ebrard, el funcionario más sólido aunque con sucesos que lo hundirían si su propio partido se lo propone, pues lleva a cuestas el caso de la Línea 12 del Metro en la Ciudad que gobernó.
Igual podría ocurrir con Claudia Sheimbaum sobre quien pesa el accidente del Rebsamen donde fallecieron varios menores, además del tema del accidente del Metro, aunque hay pocas posibilidades que se utilicen en su contra.
Queda Adán Augusto López, Gobernador con licencia de Tabasco, originario de la tierra del presidente Lopez Obrador, que aunque el carisma no es su fuerte ni es el más conocido, tendría a sus pies toda la estructura morenista para alcanzar el objetivo.
De hecho, cualquiera que sea el elegido, va a tener a su disposición todo el aparato del Estado y de los Estados, que en este momento son 22, ya que el Partido Verde que gobierna San Luis Potosí y el PES en Morelos, son aliados incondicionales de Morena.
La oposición, llámese PAN y PRI, gobierna en 8 estados al día de hoy, mientras que MC en 2, partido que en este momento descarta ir en alianza para el 2024 con Va por México, dejando un camino hasta cierto punto cómodo para quien llegue a ser el candidato oficialista.
En 2023 se elegirá gobernador en el Estado de México y Coahuila, dos estados gobernados por el PRI y dos elecciones sumamente claves. Morena los quiere para llegar con olor a triunfo al 2024 y de paso pisotear a la alianza Va por México, a su vez, PAN, PRI y PRD buscarán ratificar sendas gobernaturas, de lo contrario, llegarán al relevo presidencial con el estigma de la derrota pues el PRI prácticamente desaparecería al quedarse con solo una gubernatura.
¿Entregarán los actuales gobernadores priistas sus estados a Morena?
Acaba de ocurrir en Hidalgo y Oaxaca (los exgobernadores de estas dos entidades ya recibieron invitación del Presidente), y de hacerlo en Edomex y Coahuila, Morena llegaría a 24 entidades gobernadas y con ello prácticamente tendría asegurado el segundo sexenio consecutivo.
En los últimos 4 años Morena ha quitado 10 gubernaturas al PRI, 7 al PAN, 2 al PRD y una al Verde, por lo que hoy 74 millones de personas están bajo su mandato, es decir, casi el 60% de la población.
Por eso Mario Delgado y los tres alfiles del presidente para el 2024, se apersonaron en el Estado de México y a la vez enviaron un mensaje de unidad y fortaleza en las filas morenistas, mientras que los partidos opositores se limitaron a mirar desde las gradas las jugadas “maestras” de sus contrincantes.
Vaya reto para los líderes opositores que pareciera que ni en sus propias filas tienen credibilidad.